Bem-aventurado aquele que lê, e os que ouvem as palavras desta profecia, e guardam as coisas que nela estão escritas porque o tempo está próximo. Apocalipse 1.3.
Y LA víspera de sábado, que amanece para el primer día de la semana, vino María Magdalena, y la otra María, á ver el sepulcro.
2
Y he aquí, fué hecho un gran terremoto: porque el ángel del Señor, descendiendo del cielo y llegando, había revuelto la piedra, y estaba sentado sobre ella.
3
Y su aspecto era como un relámpago, y su vestido blanco como la nieve.
4
Y de miedo de él los guardas se asombraron, y fueron vueltos como muertos.
5
Y respondiendo el ángel, dijo á las mujeres: No temáis vosotras porque yo sé que buscáis á Jesús, que fué crucificado.
6
No está aquí porque ha resucitado, como dijo. Venid, ved el lugar donde fué puesto el Señor.
7
E id presto, decid á sus discípulos que ha resucitado de los muertos: y he aquí va delante de vosotros á Galilea allí le veréis he aquí, os lo he dicho.
8
Entonces ellas, saliendo del sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo á dar las nuevas á sus discípulos. Y mientras iban á dar las nuevas á sus discípulos,
9
He aquí, Jesús les sale al encuentro, diciendo: Salve. Y ellas se llegaron y abrazaron sus pies, y le adoraron.
10
Entonces Jesús les dice: No temáis: id, dad las nuevas á mis hermanos, para que vayan á Galilea, y allí me verán.